Hoy amanecí con una determinación que ya había dado por perdida hace tiempo.
Tomé mi teléfono y elimine de mis contactos aquel número que desde hace tantos meses me sobraba. Cerré en un instante aquella pequeña puerta entreabierta a la esperanza que de antemano sabía que jamás se volvería a abrir del todo. Un portazo a la ilusa fantasía.
Me he sentido renovada al instante.
No hay nada mejor que saber que has hecho lo correcto, que has priorizado tu vida, que ya no dependes de nadie, que murieron los últimos recuerdos y deseos, pero sobre todo, que ya nada ni nadie te podrá dañar otra vez.
¡Hoy he sido desde hace mucho, mucho tiempo, nuevamente feliz.!
Carmen

No hay comentarios:
Publicar un comentario