Llegas como el viento,
enredándote en mi pelo,
llevándote lejos mis penas,
secando gentil mis lágrimas.
Llegas y me atas a ti,
me aprisionas dulcemente
en el más sutil
abrazo de almas.
Cobijas mis tristezas,
enredas mis ganas
y son de miel
en mis oídos tus palabras.
Llegas como el viento
en la gris mañana
y tu risa de niño
pinta una sonrisa en mi cara.
Llegas y me arrastras,
vendaval de luz
que al amor invita,
allí donde mi roto corazón,
apenas si a soñar alcanza.
Y una caricia tuya,
dos simples palabras,
un tímido beso,
un cálido abrazo,
consiguen que mi alma
florezca de nuevo
y se llene de ganas
de sentirse nuevamente amada.
Y mi cielo que ayer era negro,
hoy brilla con la colorida luz
de este alba que me regalas.
Carmen
(23 de abril del 2021)
Copyright©
No hay comentarios:
Publicar un comentario