No esperaba escuchar
nuevamente tu latido,
corazón.
Creí que habías muerto,
que te habías rendido.
Que a fuerza de amar
a quien no te merecía,
a quien jamás te amo,
a quien quebró tu fe
y pisoteo tus esperanzas,
te había perdido para siempre.
Por eso no esperaba
que volvieras a hablarme,
que regresaras tímido
a contarme entre risas
lo hermoso del amor
ni a cantar alegre
mientras vibras en mi pecho.
No, no esperaba
vivir para verlo,
para sentir profundo
el nacimiento de este nuevo sueño.
Y sé que no importa nada,
que ya no importa
nada lo vivido,
que lo que está por venir
es lo único que queda
y que si este sueño,
nuevamente se rompe,
corazón mío,
aún me quedará tu latido.
Carmen
(8 de abril del 2021)
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"Omnia mea mecum porto"
Soy todo lo que tengo
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