Enseñame a vivir sin ti - Gilberto Santa Rosa

Poco a poco ella fue aprendiendo a sobrevivir. El tiempo secó sus lágrimas y entonces supo que lo que él le enseñó con sus intermitentes despedidas fue que todo continua, que nada perdura, que tan solo evoluciona. Aprendió que el silencio grita más fuerte que las palabras y que no existe la distancia cuando se está dispuesto a seguir.

La única compañía viable es la que uno mismo puede brindarse; no es bueno basar la propia felicidad en la de otros ni aferrarse a lo que nunca fue cierto y mucho menos, nuestro.

Carmen

Alma Gemela

Entre tú y yo sobran las palabras,

para entendernos con una sola mirada

basta mirar nuestros ojos y ver

en ellos reflejada nuestra alma.

Entre tú y yo los espacios se achican

y se hacen cortas las distancias

cuando en el suspiro de la brisa que nos roza,

sentimos la caricia del beso que enamora.

Sin ti tan sólo el frío y la nada.

Sin mí, la soledad vacía.

Tú me buscabas en las estrellas,

yo en los espacios infinitos que recorría.

Y bajaste tu mirada del cielo a la tierra

para posarla en mis versos

que la pena y el dolor confundían.

Y me hablo tu corazón

y te respondió la tímida sonrisa

que en mis labios al verte floreció.

Y nos miramos a los ojos,

mientras dejamos hablar

al renacido amor.

Y no hubo palabras

ni sorpresa ni urgencia ni prisas.

Tan sólo el reconocimiento de

dos almas que de nuevo

en una se fundían y entre risas,

sin hablarse se decían:

"Por fin te encontré,

pedacito de alma

que complementas la mía."

Carmen

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"Omnia mea mecum porto"

Soy todo lo que tengo

 

La sintonía de mi vida

 

My sadness

Sergey Grischuk

Si tuviera que ponerle sintonía a mi vida, creo que esta melodía sería perfecta.

Mi vida siempre transcurrió y transcurre bajo el signo de la melancolía y la tristeza. Con el ritmo de la lluvia de otoño al caer sobre las hojas que van cayendo de los árboles; con ese repiqueteo manso y pertinaz que pareciera ir marcando mis pasos, sin prisa pero sin pausa; siempre adelante sin mirar atrás...

Sola...

Siempre sola, con la única compañía de mi propia tristeza y mi soledad.

Carmen

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"Omnia mea mecum porto"

Soy todo lo que tengo

La melodía de este video está producida por el compositor ucraniano, Sergey Grischuk.

Y las imágenes pertenecen al joven fotógrafo checo, Janek Sedlář, especialista en fotografiar paisajes con un halo irreal. Sus bosques de ensueño fueron captados en la región donde vive, Moravia y en la reserva natural de los Cárpatos Blancos.

Y la mañana...

La mañana se tiñó de negro

y se cubrieron los cielos

con el tul de las sombras.

Nubes que presagiaban muerte,

muerte que anunciaba el viento

y tu mano soltó mi mano

y mi mano dolida emprendió el vuelo.

Vuelo náufrago de olvido,

sin horizonte ni luna

ni estrellas ni guía,

barco a la deriva cuyo timón

maneja el timonel manco

que de mi corazón hizo su abrigo.

¡ Oh, muerte !

Muerte cercana y negra,

muerte que se torna amiga.

Amiga del dolor que me llena,

este dolor que siempre me acompaña,

que siempre fue tan mío.

¡ Qué ilusa ilusión baldía !

Que ceguera de no querer ver

que no podrían conjugarse en mi

ni los verbos sagrados ni los votos divinos

ni podría ser así de nadie,

de nadie que no fuera

tan sólo desolación y olvido.

Carmen

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"Omnia mea mecum porto"

Soy todo lo que tengo

Somos Ángeles

"Todos somos ángeles que sólo tenemos un ala.

Todos somos ángeles buscándonos unos a otros. 

Todos los ángeles que no pueden alcanzar el cielo 

porque nos necesitamos unos a otros para volar.”

Karen Drucker

Hacerme Falta - Rodrigo Rojas

"...Hay tanto que puedes hacerme

y eliges siempre hacerme falta..."

Ella... (Resultado presente)

Nació de un sueño jamás soñado.

De los amores muertos,

de los amantes que nunca se amaron.

Nació, mariposa de alas dormidas,

con los ojos vendados

por mil mentiras añejas

de polvo y sangre vencida.

Fue dulce su venida.

La llegada de la vida a la vida,

arrastrando la muerte pretendida,

ganando luz a las sombras,

sembrando a su paso

sólo paz y armonía.

Nació, música de violín

que lloraba confundida,

notas amargas de desdicha.

Nació de nuevo al amor y a la vida,

con el asombro dibujado en sus manos,

los ojos de no querer ver

la mirada perdida

y mariposas que revoloteaban

en su estomago aún helado

cuando él le decía "eres mía".

Nació, real de fuerza infinita,

sueño tanto tiempo esperado,

amado, deseado,

que en un suspiro manifestó

profunda la dicha.

Nació y es presente

real y vivo

el amor que manifiesta,

la dicha de saberse amada

más allá de la distancia

y el tiempo que les aleja,

más allá de lo irreal

queda un sueño limpio

que será realidad absoluta

rompiendo todas las ataduras

que a la soledad condenaba

su frágil alma etérea.

Carmen

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"Omnia mea mecum porto"

Soy todo lo que tengo

 

Ella... (Antes y después)

Imagen de Nanne Tiggelman en Pixabay

Cuando sus caminos se cruzaron, ella creyó que había encontrado el verdadero amor. Le sentía tan cercano, tan igual a ella, que pensó que era su alma gemela a pesar de que algo en su interior le susurraba que no era así. Le amó tanto que nada le negó. Le dio su alma y le brindó su corazón, aunque eso a él, jamás le importó. Lloró tanto que sus ojos se secaron, su sonrisa se heló y aun así, le perdonó mil veces y otras mil veces de nuevo le creyó.

Tantas veces herida de muerte por la daga de su desamor, que de repente se convirtió en piedra a la que nadie daña, a la que nada ni nadie hiere, la que no ama, la que no cree y mucho menos cree ya en el amor.

Ya no llora porque no siente ni pena por amor. Entendió que quien la miente no la miente a ella porque nunca le creyó. Se miente a sí mismo aunque se sienta el ganador.


Carmen


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"Omnia mea mecum porto"
Soy todo lo que tengo