CATARSIS
La decisión de amarse nunca muto sus ganas de herirla, su afán por encontrarle faltas que ella nunca cometía. Nunca tuvo un detalle, una simple palabra fuera del horario estipulado para hablarse. Nada.
Entre ellos todo fueron propósitos. Propósitos que sólo quedaron en el intento, en la palabra incumplida, en las promesas que se perdieron en el subsiguiente silencio que les embargaba.
La confianza, rota una y otra vez, se fue quedando en nada. Una nada plagada de amargura y reproches que iban y venían... Y les fue envenenando el alma.
Una decisión tomada in extremis, lo cambió todo. Les cambio la vida...
Y lo que debió ser una existencia plagada de dicha, se volvió de repente soledad, caminos separados, tristeza infinita y eterna en las almas.
Carmen
(17 de febrero del 2016)
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"Omnia mea mecum porto"
Soy todo lo que tengo
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