MI MANO EN TU MANO
Hubo un tiempo ya lejano,
perdido en el recuerdo
borroso de los días que pasan,
en el que mi mano en tu mano
era para mi la vida misma.
Tu mano era la fuerza
que me empujaba a seguir
y la caricia que dibujaba
en leve brisa fresca,
pinceladas de sueños y dichas.
Hubo un tiempo ya lejano,
en que mi mano quedó
suspendida en el vacío,
rozando la nada que
le dejo tu partida.
Y mi mano quedó marchita
en una espera vana,
se acostumbró a la soledad
olvidando el calor de tu roce,
el color de los sueños forjados
y el sabor de aquella dicha.
Hubo un tiempo ya lejano,
en que mi mano en tu mano
conoció el amor...
Pero...
Hubo un tiempo ya lejano
en el que también de tu mano,
conoció el desamor y la desdicha.
Un tiempo que quedará en el recuerdo,
como quedan las cosas baldías,
las promesas rotas,
las más crueles mentiras.
Carmen
(30 de diciembre del 2014)
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