óleo de Víctor Bauer
TODO UN OCÉANO DE DISTANCIA
Todo un océano los separaba y sin embargo, ella se empeñaba en esperarle cada tarde sentada en la arena de la playa. Todo un océano de distancia y sin embargo, él la llamaba a gritos cada mañana desde su orilla lejana. Su voz, lejana y profunda, salina y sagrada. La voz que ella siempre esperaba, la misma voz que en el murmullo de las olas le decía, cuanto la amaba.
Carmen
(30 de abril del 2017)
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"Omnia mea mecum porto"
Soy todo lo que tengo
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